martes, 6 de agosto de 2019


El acróbata de los azotes

En la educación de un príncipe de Inglaterra cumplía un papel fundamental el Niño de los Azotes. Cuando el príncipe cometía un error o una transgresión, se propinaba al Niño de los Azotes el castigo que estaba prohibida descargar sobre la sagrada persona de Su majestad.
El famoso acróbata italiano Archange Tuccaro, autor del primer tratado sobre saltadores y volatineros (Trois dialogues, París, 1559) fue contratado para enseñar el arte acrobático al emperador Maximiliano de Austria. De acuerdo al relato de un testigo presencial, cada vez que el monarca cometía una torpeza mientras realizaba una de sus volteretas en el aire, un joven saltimbanqui caía al suelo en su lugar. A causa de la poca habilidad natural de Maximiliano para este tipo de ejercicio, los jóvenes acróbatas, con los huesos rotos, debían ser frecuentemente reemplazados.

Ana María Shua

Resultado de imagen de Acróbata

No hay comentarios:

Publicar un comentario